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In the Bible, fog is an image that precedes great revelations.
I was praying fervently and had a very different vision. I saw the object of my prayer under a dome shape of fog. At the top, the fog was thicker and much lighter at both ends. At the beginning of my prayer, I was exerting all my strength to confront the power of darkness. But that fog communicated calm. Although I can’t explain it, there was a reassuring comfort. Deep in my heart I know everything is okay.
As a vision, it was strange to me, because it is fog. But, since everything related to God is in perfect timing, a day before He presented the story of Moses to me. And I remembered that whenever it is dark there is light. Whenever there is evil there is good. So, in my search for understanding, I devoured my memory trying to find some biblical basis for it.
I found many verses, but for space saving I’ll use this:
“If you then, being evil, know how to give good gifts to your children, how much more will your heavenly Father give the Holy Spirit to those who ask Him?”” (Luke 11:13 ).
I asked the Lord to give the Holy Spirit to the object of my prayer, because that is the supreme good of God for His children. That fog is God telling me how insignificant any matter is for Him. Nothing is impossible for God, it is like the fog, as soon as the sun rises, it disappears without resistance.
If we, being evil, give good gifts to our children, how much more does our heavenly Father? And I am happy and full of gratitude! Thanks, Father!
This is my Story! What’s Yours?
La niebla de la liberación
En la Biblia, la niebla es una imagen que precede a las grandes revelaciones.
Estaba orando fervientemente y tuve una visión muy distinta. Vi el objeto de mi oración bajo una forma de cúpula de niebla. En la parte superior, la niebla era más espesa y mucho más ligera en ambos extremos. Al comienzo de mi oración, estaba ejerciendo todas mis fuerzas para enfrentarme al poder de las tinieblas. Pero esa niebla me comunicaba calma. Aunque no puedo explicarlo, hubo un consuelo tranquilizador. En lo más profundo de mi corazón sé que todo está bien.
Como visión, fue rara para mí, porque es niebla. Pero, como todo lo relacionado con Dios es en el momento perfecto, un día antes Él me presentó la historia de Moisés. Y recordé que siempre que está oscuro hay luz. Siempre que hay mal hay bien. Entonces, en mi búsqueda de comprensión, devoré mi memoria tratando de encontrar alguna base bíblica para ello.
Encontré muchos versos, pero para ahorrar espacio usaré este:
“Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?” (Lucas 11:13).
Pedí al Señor que diera el Espíritu Santo al objeto de mi oración, porque ese es el bien supremo de Dios para sus hijos. Esa niebla es Dios diciéndome cuán insignificante es cualquier asunto para Él. Nada es imposible para Dios, es como la niebla, apenas sale el sol, desaparece sin resistencia.
Y si nosotros, siendo malos, damos buenos dádivas a nuestros hijos, ¿cuánto más nuestro Padre celestial? ¡Y estoy feliz y llena de gratitud! ¡Gracias Padre!
¡Esta es mi historia! ¿Cuál es la tuya?